COMO BORDAR UN CUELLO A MANO A PUNTO ESCAPULARIO PARA TRAJE COMUNIÓN

Pronto hará un año que cosí un vestido de primera comunión para Paula. En realidad su madre se ocupó de la falta y enagua y yo de la parte superior del cuerpo.


De su idea del vestido lo mas complicado era el cuello y los puños, que irían bordados a mano a punto escapulario, que si bien lo conocía, nunca lo había hecho entre bieses y menos en un cuello redondo.

Para el trazado del cuello tenía las ideas claras. Partiendo del patrón del cuerpo y decidido el ancho del adorno bordado, había que sacar unas plantillas para trazar la pieza del escote entera y trabajar sobre ella con los bieses y el bordado.

Trasladé las plantillas el cuello unidas por los hombros a una hoja de papel cuadriculado marcando el contorno, el centro delantero y las líneas de los hombros. Esto es importante para después aplicar el cuello terminado al cuerpo del vestido.

Corté cintas al bies de 3,5 cm de ancho y las planché con un doblador. Volví a planchar la cintas con los cantos cortados hacia dentro y dando a la vez forma redondeada con la plancha, de modo que el canto abierto quedase por la parte externa de la curvatura.

Esta cinta de bies planchado se va hilvanando sobre el papel cuadriculado resiguiendo el trazado del cuello. La cuadrícula ayuda de alguna manera a mantener una distancia regular entre las cintas.

Como ves es la siguiente foto, todos los bieses van con el canto abierto hacia abajo. Esto es porque en la parte mas corta queda bien pulido el escote, y en la parte mas larga podremos insertar el cuerpo del vestido entre los dos cantos abiertos del último bies.

Aclarar que el vestido de Paula lo hicimos hace un año, guardé algunas fotos del resultado y ahora os enseño un prototipo con el proceso de bordado del cuello, que tuve que aprender sobre la marcha y con la ayuda de Eva Maseda, una artista del bordado a mano. Si no la conocéis os invito a visitar su perfil en Instagram @evamaseda  Puede que no sea el estilo de todas, pero hay que reconocer que tiene un arte para los bordados clásicos a mano fuera de lo común.

Bordamos a punto escapulario uniendo los bieses y cuidando prender las dos telas en los cantos donde el bies va abierto.
Al final de este post te dejo un vídeo con el proceso de este tipo de bordado a mano.

 Una vez terminado de bordar, se pasa una marca sobre el cuello señalando las líneas del hombro, centro delantero y centro espalda, que tenemos marcadas en el papel. Ahora retiramos los hilvanes  y planchamos bien.

Para aplicar el cuello al cuerpo del vestido tenemos que descontar al patrón las piezas que utilizamos como plantilla para trazar el cuello entero. Ponemos de nuevo el patrón sobre el delantero y la espalda de tela y trazamos la nueva línea por donde vamos a recortar pero aumentando un centímetro para margen de costura.

Ahora unimos el cuerpo por las costuras de los hombros, planchamos y coseremos el bies haciendo coincidir todas las líneas de aplomo de los hombros y centros.

Para un trabajo mas pulido, se hace la unión con pespunte oculto, es decir, encaramos los derechos del cuerpo y el cuello bordado y cosemos sobre el bies abierto justo por encima de la línea de plancha. Recuerda que las marcas de hombros así como del centro delantero deben coincidir.

Nos quedará por el revés pendiente de rematar el otro canto de bies que puedes prender con puntadas a mano.

Yo lo hice con un pespunte por el derecho, justo encima de la unión.

De esta manera queda prácticamente invisible, pero hay que tener en cuenta prender al mismo tiempo el bies por debajo. Esto es para quien tiene mucha práctica. Con puntadas a mano también queda perfecto.

Los extremos del cuello se rematan también a mano remetiendo las puntas de cada bies dentro de sí mismo. Otra opción sería pulir con un bies o bien dejar largas las puntas del primero para luego hacer ahí una esquina y reseguir hacia abajo a lo largo de la abertura.

Ahora algunas fotos del vestido original terminado y de Paula.

El cuerpo del vestido es de raso y organza, trabajadas juntas. Va forrado con batista de algodón excepto las mangas. Las sisas las pulimos con bies de raso para que no piquen. Para los bieses del cuello usé el mismo raso. Las mangas llevan puño con el mismo bordado que el cuello y terminan con una tira fruncida en encaje de blonda, igual que el que lleva en el bajo de la falda.

Ella eligió el azul turquesa para el lazo de la cintura. Para cerrar el vestido usamos una tira de presillas de cordón de goma que venden por metro en las mercerías y botones pequeñitos forrados con el raso del vestido.

La falda va fruncida, es igual que el cuerpo de raso y organza pero con lorzas de distintos anchos. Lleva debajo una enagua para dar mas volumen.

Y aquí dejo el vídeo que gravé haciendo el punto escapulario para este prototipo.